Curvas de apalancamiento MultiTrac
La suspensión MultiTrac de Marin utiliza diferentes curvas de apalancamiento, en función del modelo y del recorrido de la suspensión, garantizando al piloto un sistema con el mejor equilibrio posible entre eficacia y control.
Equilibrio entre pequeños baches y eficacia de pedaleo
POR QUÉ
Esto proporciona a los pilotos una sensación de felpa sin sacrificar la transferencia de potencia al suelo a través del movimiento no deseado de la suspensión.
QUÉ
El movimiento inicial de la suspensión suaviza los pequeños baches, lo que permite a la moto llevar más velocidad a través de situaciones cambiantes del camino, así como proporcionar una mayor comodidad y control para el piloto, sin sacrificar la transferencia de potencia o tracción.
TECNOLOGÍA
El modelo Multitrac utiliza curvas de palanca de arranque bajas, así como valores de antisquat que están dentro del 90-110% en toda la gama de marchas.
Apoyo a mitad de carrera
Permite que la moto mantenga la geometría adecuada al circular por terrenos abruptos y evita que se salga de recorrido al tomar curvas. Así es como debe sentirse la suspensión.
QUÉ
La moto mantiene una geometría consistente y controlada y la tracción de la rueda trasera a través de senderos difíciles, lo que permite una conducción predecible a través de terrenos variados.
TECNOLOGÍA
La sección media lineal de las curvas de palanca juega a la perfección con la tecnología de amortiguación actual para garantizar un buen apoyo, y los números antielevación que aseguran que se mantenga la geometría adecuada de la bicicleta en tramos empinados de senderos.
Control de fondo
POR QUÉ
Para no reventar el recorrido de la moto en los golpes fuertes. Esto es fundamental para mantener el control e inspirar confianza cuando más se necesita.
QUÉ
La "rampa" al final del recorrido de la suspensión para mitigar las salidas de fondo duras, así como proporcionar una sensación de conducción más controlada al llegar al final del recorrido, especialmente en golpes y aterrizajes duros.
TECNOLOGÍA
Se utiliza un "gancho regresivo" al final del recorrido, que genera mecánicamente una fuerza que frena la rueda y resiste los golpes bruscos, a la vez que mantiene al mínimo las tensiones en el amortiguador trasero en los impactos más fuertes.